Introduccion

          El estigma contra la salud mental sigue siendo un problema generalizado en la comunidad latina. la población latina en los Estados Unidos se enfrenta a desafíos únicos cuando viene a la salud mental y el acceso a la atención adecuada. Un estudio que habla de la salud mental en perspectiva de los latinos en areas rurales menciona que aproximadamente 44% de los 19,8 millones de Imigrantes en los Estados Unidos se caracterizan como hispanos o latinos (Batalova J, Hanna M, & Levesque C (2021) y de ellos el 18.4% de los hispanos han experimentaron un enfermedad de salud mental en 2020 pero solo el 35% han recibido un tratamiento de acuerdo con la alianza nacional sobre enfermedades mentales (NAMI,2021). Incluso en areas rurales donde problemas de la salud mental son altas pero el acceso a servicios profesionales son bajos la velocidad es peor. NAMI menciona que hay “Más de la mitad de los adultos jóvenes hispanos de edades entre 18 y 25 años con enfermedades mentales graves no recibir tratamiento”(NAMI, 2023). Esta desigualdad pone a estas comunidades en un mayor riesgo de desarrollar formas más graves y persistentes de condiciones de salud mental porque sin tratamiento las condiciones de salud mental se empeorar.

Desarollo

          La cultura latina pone un fuerte énfasis en el colectivismo, la familia y la idea de “resolviendo” problemas dentro de la familia. Esto puede hacer que las personas que buscan ayuda fuera de su círculo inmediato, contribuyen al estigma contra la salud mental y eso puede llevar a que las personas retrases la búsqueda de tratamiento, lo que puede agravar las condiciones de salud mental y aumentar el riesgo de situaciones de crisis. Las barreras del idioma son otro factor que puede limitar el acceso a los servicios de salud mental para los latinos que solo hablan español y hace dificultad a búscar o encontrar terapeutas que hablen español y comprendan la tonalidad culturales. No es solo por la falta de servicios o acceso a servicios pero tambien os Latinos indocumentados que buscan tratamiento de salud mental pueden tener implicaciones para su estatus migratorio, lo que lleva a una subutilización de los servicios. Los factores de estrés económicos y sociales pueden tambien aumentar aún más el riesgo de suicidio entre los latinos. La pobreza, la discriminación y el estrés de la aculturación en particular entre los inmigrantes pueden contribuir a sentimientos de desesperanza y desaliento. Los desafíos económicos a los que se enfrentan muchas familias latinas pueden amplificar el impacto de estos factores de estrés lo que potencialmente conduce a un mayor riesgo de suicidio.La familia y la comunidad es un valor bien alto para la cultura latina. Aunque, estos factores de familia pueden proteger contra el suicido pueden tambien causar presion y expectaciones que los individuos tienen que luchar a cumplir. Hay un miedo de traer vergüenza o decepción a la familia por la el aumento de cargas emocionales, lo que dificulta que las personas comuniquen sus luchas emocionales de hecho al estudio de las perceptivas latinas a la salud mental. 


Conclusion

         Es crucial para abordar las disparidades en la atención, reducir el riesgo de problemas de salud mental y promover el bienestar general de los Latinos especialmente los que viven en los Estados Unidos y sienten lejos de familia y con las condiciones que vienen de ser un inmigrante. El estigma y las barreras culturales pueden llevar a la subdiagnóstico y subtratamiento de condiciones de salud mental entre los latinos, lo que resulta en que las personas no reciban la atención que necesitan por eso es bien importante que ayudemos a mejorar esta estigma contra la salud mental en la comunidad latina y que los factores no les impiden que seguir adelante. 

Fuentes

  • Eghaneyan, B. H., & Murphy, E. R. (2020). Measuring mental illness stigma among Hispanics: A systematic review. Stigma and Health, 5(3), 351–363.